Una dificultad con la que se enfrentan cada curso los centros de idiomas es la de cómo formar grupos para las clases de manera eficiente y eficaz tanto para el centro como para los alumnos. Los alumnos de idiomas no son homogéneos. Las clases se componen, generalmente, de una amplia variedad de edades y experiencias con niveles muy diferentes. Bien lo saben los responsables de hacer los grupos en los centros de idiomas.
Esto sucede menos en clases regladas donde los estudiantes teóricamente parten del mismo lugar o han pasado por el mismo recorrido hasta llegar a ese curso. Sin embargo, en área de idiomas es muy habitual que una clase se componga de personas de diferentes edades, con diferente nivel de estudios y que han tenido un contacto con el idioma muy distinto (viajes, cine, series, música, etc.). Por tanto, supone un gran reto para el centro formar grupos que permitan optimizar a sus aulas, profesores y horarios.
En Dexway, contamos con cinco niveles avance estructurados por idioma alineados con el Marco Común Europeo de Referencia, que a su vez se dividen en varios subniveles. En tres se dividen los tres primeros niveles (A1, A2 y B1) y en dos los otros dos restantes (B2, C1).
Esto hace un total de 13 niveles, algo inviable para mantener por separado en un centro de idiomas. Aunque sería lo ideal, en la práctica no se da esta división por su complejidad y por los recursos que requiere. En la mayoría de centros se establecen 5 o 6 subniveles.
Si no tiene suficientes aulas, ¿pierde matrículas?
Matricular a un alumno en clases presenciales por encima o por debajo de su nivel, es abocarlo al fracaso: El alumno siente que pierde el tiempo y esto genera aburrimiento y frustración. Al final, el alumno pierde el interés y termina abandonando las clases. Solo cuando un alumno ve que avanza en el aprendizaje del idioma es capaz de mantener la motivación para continuar con los estudios.
CAE dispone de un saber hacer de más 35 años en la formación e-learning, dando soluciones totalmente personalizadas para centros de idiomas. Las soluciones globales de Dexway Idiomas están preparadas para dar respuesta y ayudar a los centros de idiomas a deshacerse de uno de sus principales quebraderos de cabeza asegurando la continuidad de los alumnos y fidelizando su asistencia durante todo el curso.
Conocer cuáles son los conocimientos reales en el idioma de un alumno, es imprescindible para evaluar correctamente el nivel de ese alumno.
Prueba de nivel y refuerzo por objetivos
La prueba de nivel inicial no solo nos da información del nivel en el que se encuentra el alumno, también de cuáles son las áreas en las que presenta más carencias. Con esta información pueden programarse refuerzos, incluso por objetivos, para solventar estas debilidades. Este refuerzo puede ser presencial e individual o mediante píldoras online que se asignan a cada alumno al margen de sus clases.
Trabajando estas carencias, los alumnos pueden centrarse en aquellos temas específicos con los que más dificultades tienen consolidando sus conocimientos y avanzando más rápidamente en las áreas que dominan.
Y si no hay suficientes alumnos para formar un grupo… ¿se pierden matrículas?
Una vez determinado el nivel y el subgrupo (así como el refuerzo para poder ubicarlo en la clase correcta) puede surgir el problema de que el grupo adecuado a su nivel esté completo o que no hay suficientes aulas o alumnos para constituir un grupo de cada nivel.
Las soluciones globales de Dexway están enfocadas a solucionar esta problemática ofreciendo más flexibilidad y recursos a los centros de idiomas para, no solo acoger a todos los alumnos interesados, sino hacerlo de una forma eficaz que garantice que no se caigan del curso a mitad del año.
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