Educación
En la última década, hemos visto un gran número de avances tecnológicos, muchos de ellos con una gran repercusión en el sector educativo. La aparición y el aumento de las plataformas digitales han permitido que los estudiantes ahora puedan aprender con nuevos métodos cada vez más cómodos para ellos.
Uno de los que ha tenido más repercusión en la comunidad educativa es el aumento de las plataformas de formación online y los learning management systems (LMS).
Estos espacios formativos online, también conocidos como «plataformas de formación» o «campus virtuales» ofrecen todo tipo de oportunidades, tanto para los alumnos como para los docentes.
A continuación, enumeramos seis ventajas de incorporar un campus virtual para la comunidad educativa.
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Un campus virtual promueve una mejor comunicación entre compañeros de clase
Alojar un sistema de campus virtual es una manera excelente de animar a los alumnos a trabajar en equipo y a comentar lo que están aprendiendo. La mayoría de nosotros estamos en contacto con nuestros amigos y familiares todos los días mediante la tecnología: de igual modo, un learning management system (LMS) con un aula virtual puede servir para construir una comunidad educativa sólida.
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Un campus virtual permite a los estudiantes controlar su propio aprendizaje
Casi todos los productos de los medios de comunicación que consumimos son a la carta, cuyas ventajas son claras: podemos acceder a una noticia, una película o un programa de televisión concreto siempre que queramos. Este mismo paradigma lo encontramos cada vez más en el sector educativo, donde los estudiantes quieren poder controlar más lo que aprenden y cuándo lo hacen. Ofrecer un espacio digital de aprendizaje mediante un learning management system (LMS) y un aula virtual les permite trabajar todo el material a su ritmo, revisando o pasando por alto lo que crean apropiado.
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Un campus virtual elimina las barreras geográficas
Tradicionalmente, los estudiantes solo podían asistir a centros de formación y escuelas de idiomas a las que se pudiesen desplazar fácilmente. Ahora que cada vez hay más instituciones que ofrecen formación online mediante aulas virtuales, el factor geográfico ha dejado de ser un problema. Es una ventaja importante para los estudiantes, porque ya no tienen que limitar la búsqueda de oportunidades a su vecindario. Ahora pueden comparar precios y elegir una escuela de idiomas que ofrezca los cursos de idiomas, los docentes de calidad y el tipo de formación que crean que les va a ofrecer un valor añadido.
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Un campus virtual es más accesible para estudiantes con poco tiempo
Una de las claves por las que los potenciales estudiantes no se apuntan a escuelas de idiomas es el tiempo que ello requiere. Muchos de ellos deciden no apuntarse a un curso, dado que saben que no van a poder «robar» tiempo al trabajo o a la familia para ello. Una plataforma educativa facilita que estas personas completen los materiales del curso más tarde, después del trabajo y cuando los niños estén ya en la cama. Este formato de docencia también permite a los estudiantes matricularse en más de un curso a la vez sin tener que preocuparse por el horario de estos.
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Un campus virtual facilita que los estudiantes pidan ayuda
Algunas personas asumen que los learning management systems (LMS) hacen a los docentes más anónimos frente a la comunidad estudiantil, pero no es así en absoluto. Una plataforma de formación facilita el contacto directo entre los estudiantes y los docentes, mediante correos electrónicos, mensajes, llamadas telefónicas, vídeos, chats y el aula virtual. Es muy fácil para los estudiantes pedir ayuda siempre que lo necesiten. El valor añadido de esto es que los estudiantes a menudo se sienten bastante más cómodos pidiendo ayuda de forma individualizada que si tuviesen que levantar la mano delante del resto de compañeros en una clase presencial.
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Un campus virtual permite a los estudiantes practicar siempre que quieran
Uno de los aspectos más importantes de aprender un idioma con éxito es hablarlo a menudo y practicar la comprensión oral. Los cursos tradicionales suelen ofrecer poca práctica de calidad fuera del horario lectivo. Una plataforma digital de formación cambia esta situación y permite a los estudiantes entrar y conversar con sus compañeros de clase siempre que quieran. Esto no solo significa que los estudiantes vayan a tener más éxito estudiando de esta forma, sino que también les ayuda a sentirse fácilmente parte de la comunidad educativa. Tendrán la oportunidad de entrar en un aula virtual e interactuar y charlar con otros estudiantes de todo el mundo siempre que quieran, o la oportunidad de conversar en tiempo real con un docente.
Está claro que las ventajas de usar un campus virtual son muchísimas. Al invertir en este tipo de espacios digitales instalando un learning management system (LMS), las escuelas de idiomas mejoran la experiencia de sus estudiantes facilitándoles el acceso a un aula virtual, a los materiales del curso, a recursos formativos adicionales, a tutorías individualizadas y al apoyo de los compañeros.
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